La «paja» en el ojo
Hace algún tiempo atrás, la remoción de la «paja» del ojo del hermano cobró nuevo significado para mí. Antes me había preguntado que, si se tomara la ilustración de nuestro Señor en Mateo 7:3-5 de manera literal—si fuera posible que una persona tuviera una viga literalmente atascada en su ojo—¿cuánto se tuviera que pagar a un médico para que extrajera la viga del ojo? Por otra parte, la paja en el ojo no parecía proponer tal dilema, hasta que tuve que llevar a mi madre al oculista.
Mi madre tenía un chequeo de rutina. El doctor le pidió que leyera la primera línea en la tabla optométrica. Mi madre comenzó, pero pronto tuvo dificultad inusual para leer las letras. El doctor se acercó y examinó sus ojos por un par de segundos, y entonces dijo: «Tienes una pestaña en el ojo. ¿Quieres que te la saque?». Ella respondió: «Sí». Él tomó una pinza y sacó la pestaña tan pronto como acercó la pinza a los ojos de ella, y dijo: «¡Listo!». Luego continuó con el examen.
Yo consideré la circunstancia como un asunto gracioso, hasta que recibí la cuenta de la clínica una semana después. Esta decía:
Consulta de rutina: 230 dólares
Remoción de pestaña: 50 dólares
¡Ahora solamente me pregunto cuánto costaría sacar la «paja» del ojo del hermano!
—Moisés Pinedo