Su Propina

Un niño de 10 años entró a una cafetería y se sentó. Una mesera le dio un vaso con agua y le preguntó qué quería ordenar. Él preguntó: “¿Cuánto está la copa de helado?”. La mesera respondió: “Cincuenta centavos”. El niño sacó sus monedas, y después de contarlas, preguntó: “¿Cuánto está el cono de helado?”. Otros estaban esperando ser atendidos, así que ella dijo con impaciencia: “Treinta y cinco centavos”. Él contó sus monedas nuevamente. “Deme un helado”. Ella rápidamente lo trajo y se marchó. Cuando el niño terminó, pagó a la cajera y salió. La mesera se sintió terrible cuando vio lo que había en la mesa. Colocadas en la mesa había dos monedas de 5 centavos, y cinco monedas de 1 centavo: su propina.

—Adaptado; en Bob Phillips y Kimberly Alyn (2011), La Manera de Lidiar con Gente Pesada [How to Deal With Annoying People], (Eugene, OR: Harvest House), p. 22.