¿Fue Jonás Tragado por un Pez o una Ballena?

El libro de Jonás revela que “Jehová tenía preparado un gran pez que tragase a Jonás; y estuvo Jonás en el vientre del pez tres días y tres noches” (1:17, énfasis añadido). Algo de 800 años después, Jesús aludió a este evento impresionante (Mateo 12:39-41). En algunas traducciones antiguas de la Biblia, se puede encontrar el término “ballena” en vez de “gran pez” (e.g., RVA en Mateo 12:40). Y ya que los peces y las ballenas son criaturas diferentes, los escépticos argumentan que Jesús y los escritores de la Biblia cometieron un error (cf. Wells, 2012). El crítico de la Biblia, Dennis McKinsey, declaró que Mateo 12:40 es “probablemente el error científico más famoso de Jesús” (1995, p. 142). “Aparentemente Jesús no había leído el Antiguo Testamento muy cuidadosamente… Cualquiera que tenga incluso conocimiento mínimo de biología sabe que una ballena no es un pez y que un pez no es una ballena” (pp. 142-143).

Este criticismo contra Jesús y los escritores bíblicos refleja la impotencia de los ataques escépticos. McKinsey basó su criticismo únicamente en algunas traducciones realizadas muchos siglos después que Jesús hiciera Sus declaraciones. A este escéptico no le importó comparar las traducciones. No investigó la palabra que Jesús usó originalmente o que Mateo registró. Lo único que hizo es presentar una acusación cursoria que puede parecer lógica a primera vista, pero que con investigación mínima, es explicada fácilmente.

¿Cuál es la palabra griega que se traduce “ballena” en la RVA en Mateo 12:40 (como también en otras pocas versiones)? Al considerar brevemente varios diccionarios griegos respetados, podemos ver que la palabra es ketos, la cual se define generalmente como “gran criatura de mar” (Newman, 1971, p. 100), “monstruo marino” (Danker, et.al., 2000, p. 544) o “gran pez” (Vine, 1952, p. 209). Jesús indicó que Jonás fue tragado por una “gran criatura marina” que no fue necesariamente una ballena, pero que pudo haberlo sido.

Casi 300 años antes que Jesús hiciera referencia a Jonás siendo tragado por un ketos (Mateo 12:40), los traductores de la Septuaginta (la traducción griega del Antiguo Testamento hebreo) usaron la misma palabra griega (ketos) para traducir la palabra hebrea (dahg, pez) encontrada en Jonás 1:17, 2:1 y 2:10. Lo cierto es, como el erudito en hebreo y griego, Jack Lewis, concluyó, tanto dahg y ketos “hacen referencia a criaturas marinas de especie no identificada” (1976, 2:178). De ninguna manera Jesús, el Creador de todas las cosas (Juan 1:3), cometió un error en cuanto a la clase de animal que Dios “había preparado” para tragar a Jonás. El animal fue una gran criatura marina, y no necesariamente un gran “pez” según nuestra definición moderna más limitada de la palabra. Este pudo haber sido algún tipo de pez (e.g., tiburón), un mamífero que vivía en el agua (e.g., ballena), o un reptil acuático extinto que se parecía a los dinosaurios. Simplemente no podemos estar seguros. Como Dave Miller concluyó, “el término hebreo y griego carece de la precisión para identificar con exactitud a la criatura que tragó a Jonás” (2003).

Finalmente, una verdad crucial que muchos (especialmente los críticos de la Biblia) pasan por alto en este punto es que Dios no clasificó a los animales miles de años atrás según nuestro sistema moderno de clasificación. En la Creación, Dios dividió a los animales en grupos naturales básicos. Hizo animales acuáticos y alados en el quinto día, y animales terrestres en el sexto día (Génesis 1:20-23,24-25). Así como Dios clasificó a los murciélagos como “aves” ya que ambos animales vuelan (Levítico 11:13-19; vea Lyons, 2009, 29[7]:49-55), Él pudo haber clasificado a las ballenas como “peces”, ya que ambas criaturas viven en el agua. Acusar a Jesús y los escritores bíblicos de categorizar incorrectamente a un animal debido a la clasificación de animales del siglo XIX de Carolus Linnaeus, o debido a algún otro método moderno de clasificación de animales, es ilógico e injusto.

Referencias

Danker, Frederick, et.al, (2000), Léxico Griego-Inglés del Nuevo Testamento [Greek-English Lexicon of the New Testament] (Chicago, IL: University of Chicago Press).

Lewis, Jack (1976), El Evangelio Según Mateo [The Gospel According to Matthew] (Austin, TX: Sweet).

Lyons, Eric (2009), “¿Cometieron Errores Biológicos los Escritores de la Biblia?” [“Did the Bible Writers Commit Biological Blunders?”] Reason & Revelation, julio.

McKinsey, Dennis (1995), La Enciclopedia de la Falibilidad Bíblica [The Encylopedia of Biblical Errancy] (Amherst, NY: Prometheus).

Miller, Dave (2003), “Jonás y la ‘Ballena’” [“Jonah and the ‘Whale’?”], Apologetics Press, http://www.apologeticspress.org/apcontent.aspx?category=6&article=69.

Newman, Barclay, Jr. (1971), Un Diccionario Conciso Griego-Inglés del Nuevo Testamento [A Concise Greek-English Dictionary of the New Testament] (Londres: United Bible Societies).

Vine, W.E. (1952), Un Diccionario Expositivo de las Palabras del Nuevo Testamento [An Expository Dictionary of New Testament Words] (Old Tappan, NJ: Revell).

Wells, Steve (2012), La Biblia Anotada del Escéptico [Skeptic’s Annotated Bible], http://www.skepticsannotatedbible.com/contra/whale.html.