Lidiando con la Tentación

Lectura bíblica recomendada: Lucas 4:1-13

Introducción

A. Sea que le guste o no, la tentación es algo que todos enfrentamos (1 Corintios 10:13).

B. Aunque todos caemos en tentación algunas veces, las Escrituras enseñan que no debemos temer (Santiago 1:2-4; 2 Pedro 2:9). ¿Cómo deberíamos lidiar con la tentación?

Exposición

I. Corra siempre que tenga la oportunidad de hacerlo.

A. La Biblia nos dice que huyamos de la fornicación (1 Corintios 6:18), la idolatría (1 Corintios 10:14) y las pasiones juveniles (2 Timoteo 2:22).

B. Debemos huir de cualquier especie de mal (1 Corintios 10:14-28; 1 Tesalonicenses 5:21-22).

C. Debemos huir de los falsos maestros (Juan 10:1-5).

II. Ore sin cesar.

A. Esta es una de las cosas que ayudó a Jesús a través de la tentación (Mateo 4:2; Lucas 4:2; 22:39-46).

B. Jesús dijo a Sus discípulos que oraran cuando enfrentaran tentación (Mateo 6:13; Marcos 14:38).

C. En frente de la tentación, la oración puede ser una herramienta valiosa (Hechos 4:23-31).

III. Estudie la Palabra de Dios diligentemente

A. Cuando fue tentado, Jesús dependió grandemente de la Escritura (Mateo 19:3-6).

B. El estudio cuidadoso nos ayudará a vencer la tentación (Salmos 119:11; Mateo 12:34-37).

Conclusión

A. Aunque no es una parte agradable de la vida, la tentación no es algo que debemos temer ya que nuestro Salvador puede y está dispuesto a ayudarnos.

B. Si permanecemos en el Señor, podemos apagar todos los dardos de fuego que el maligno lanza hacia nosotros.