Sombras Bíblicas

Lectura bíblica recomendada: Colosenses 2:16-17

Introducción

A. Aunque la palabra “sombra” frecuentemente porta connotación negativa (e.g., “asechar en la sombra”, “la sombra de la muerte”), algunas veces las sombras pueden ser buenas (vea Job 7:2; Salmos 17:8-9; 57:1; 91:1).

B. Las sombras que encontramos en la Palabra de Dios son maravillosas ya que nos revelan que Dios ha estado operando en los asuntos humanos, incluso cuando parece que Él nos ha olvidado.

Exposición

I. La búsqueda de sombras es un principio bíblico.

A. A Pablo le gustaba hablar de las sombras en el Antiguo Testamento (Colosenses 2:16-17; Hebreos 8:3-6; 7:23-28; 9:7; 10:1-4,11-14).

B. Los escritores del Antiguo Testamento también hablaron del futuro en cuanto a cosas maravillosas que vendrían (Deuteronomio 18:18; Ezequiel 37:24).

II. ¿Qué sabemos en cuanto a las sombras?

A. Usualmente las sombras no duran mucho (1 Crónicas 29:15; Salmos 144:4; Eclesiastés 6:12; Hebreos 10:1).

B. Las sombras indican la presencia de la luz (Juan 1:7-9).

C. Algunas veces las sombras nos pueden ser muy útiles (Éxodo 33:18-23; 34:5-7; 2 Corintios 3:13-4:6).

D. Las sombras encontradas en la Escritura ayudan a demostrar la providencia de Dios (Génesis 14:17-20; Salmos 110:4; Hebreos 7:1-28).

Conclusión

A. Aunque solemos pensar en ellas en términos de oscuridad y tinieblas, las sombras en las Escrituras resplandecen con la omnipotencia y benevolencia de Dios.

B. No hay lugar más seguro en este mundo que la sombra de las alas de Dios, pero este es un refugio al cual debe entrar voluntariamente (Mateo 23:37).