La Reliquia Familiar
Una mujer de 89 años de Spokane, Washington, señaló a un pintor que una gran Biblia familiar que estaba expuesta prominentemente en una mesa de centro de su sala era una “reliquia invaluable de 116 años”. El pintor comentó que eso era remarcable, y añadió: “No importa cuántos años tenga la Biblia; su contenido es lo que importa”. Ella respondió inmediatamente: “Oh, lo sé. Ciertamente eso es verdad, ya que tenemos en esa Biblia registros familiares de nacimientos, matrimonios y muertes que se extienden por todo ese tiempo; nunca los podríamos reemplazar”.
—John Underhill, Spokane, WA, 1984.